Crean dispositivo que ayuda a personas con discapacidades motoras
Por Ameyalli Villafán
México, DF. 12 de mayo de 2015 (Agencia Informativa Conacyt).- Con el propósito de generar una aplicación de inclusión para personas con discapacidad motora, Jorge Silva Arce, exalumno de la Universidad Iberoamericana (UIA), desarrolló Tecla, un dispositivo electrónico que permite a las personas hacer uso de teléfonos inteligentes y tabletas mediante movimientos de cabeza, soplidos y aspiraciones del aliento desde una silla de ruedas eléctrica.
Fotografía cortesía de Prensa Ibero
En entrevista, el doctor en Ingeniería biomédica por la Universidad de Toronto y fundador –junto con su socio Mauricio Meza– de la compañía Komodo, la cual comercializa Tecla y en donde ocupa el puesto de líder técnico, explicó cómo surgió el proyecto, así como las repercusiones que ha tenido su invento, dificultades y retos a los que se ha enfrentado durante el desarrollo del mismo.
Agencia Informativa Conacyt (AIC): ¿Cómo surgió el proyecto Tecla?
Jorge Silva Arce (JSA): El proyecto surgió originalmente en la Universidad de Toronto y posteriormente se trasladó al Ontario College of Art and Design, que es un centro inclusivo donde la idea es investigar maneras, procesos y sistemas mediante los cuales las personas con discapacidades puedan participar en la sociedad. Este proyecto era parte de una iniciativa más grande llamada AEGIS y que involucraba diversas instituciones de Europa y tenía el objetivo de encontrar formas de hacer que las tecnologías de información emergentes fueran accesibles para personas con discapacidades.
Yo estuve a cargo de investigar cómo las personas con discapacidades motrices pudieran acceder a teléfonos y dispositivos móviles. Hoy en día hay muchas herramientas para personas con discapacidad visual pero no para gente con discapacidad motora. Pensamos que ahí podría ser mayor el impacto.
AIC: ¿Cómo fue el proceso de fabricación del dispositivo y cuánto tiempo invirtió en el desarrollo del mismo?
Fotografía cortesía de Prensa IberoJSA: Originalmente pensamos que lo más fácil sería usar tecnologías que ya existieran o adaptar las ya existentes para ver qué tan rápido podíamos generar una solución. Utilizamos una tecnología de fuente abierta (open source), por ejemplo Arduino (plataforma de softwarelibre). Una de las ventajas es que la electrónica es de muy bajo costo y la barrera de entrada para la programación de teléfonos móviles era muy baja. No había que hacer una inversión significativa para empezar a desarrollar en dispositivos Android, que fue la plataforma con la que iniciamos. La filosofía era buscar el camino de menor resistencia: the pass of less resistance.
En cuanto al tiempo, empezamos en 2009 con los prototipos y para mediados de 2011 comenzamos a enviar prototipos a universidades de Estados Unidos principalmente, y nos daban retroalimentación sobre las capacidades dispositivas del producto. Para 2013 ya estaba listo comercialmente.
AIC: ¿Cómo funciona el dispositivo Tecla?
JSA: Mediante bluetooth y wifi.El usuario, que no puede usar la pantalla, tiene herramientas adaptadas como interruptores de aliento, y al soplar o aspirar se activa. Lo más fácil es el proceso de enviar señales a los teléfonos. Lo complicado es interpretar dichas señales para poder entender la intención de la persona.
Para eso se necesita un soporte bastante elaborado en el dispositivo que ayude a traducir señales binarias en intenciones. El objetivo inicial era portar todas las tecnologías de las computadoras existentes a los teléfonos móviles, y luego adaptar los pequeños detalles que faltaban.
AIC: ¿Fue difícil la adaptación de los recursos tecnológicos?
Fotografía cortesía de Prensa IberoJSA: Lo más difícil, desde la perspectiva del softwarey hardware, fue el diseño del softwareporque los teléfonos celulares no están pensados para personas con discapacidades. Entonces teníamos que hacer ingeniería inversa y reversa para encontrar la manera de “engañar” al dispositivo y hacerlo creer que está siendo usado con gestos y dedos. En algunos casos tuvimos que hacer que nuestra aplicación engañara al teléfono y le hiciera pensar que tenía un teclado conectado para poder controlar.
El hardwareno es muy difícil de preparar, aunque por las demandas que tiene este tipo de interacción sí hay que resolver algunas cuestiones. Por ejemplo, hay teléfonos que cuando están reposo, los puertos inalámbricos se apagan. Eso representa un problema porque teníamos que investigar cómo integrar la conexión de bluetooth en todos los teléfonos, independientemente de la marca.
AIC: ¿Qué actividades pueden realizarse con Tecla?
En general, la gente con discapacidades motoras, ya sea con Android o iOS, puede básicamente hacer cualquier cosa con su dispositivo. Ayuda también a su productividad, ya que puede enviar y recibir correos, hacer textos, realizar llamadas, escuchar música, hacer uso de distintas aplicaciones, etc.
Recuerdo a un cliente en Australia que con un solo interruptor juega videojuegos con su iPad. Otra persona en Estados Unidos que tiene un negocio personal de servicios de internet y a través de su iPad coordina a sus empleados. La tecnología ahora tiene muy pocas limitaciones.
AIC: ¿Qué significa para usted participar en proyectos para la inclusión de personas con discapacidad?
JSA: Es algo muy satisfactorio, es la conclusión de la curiosidad que tenía desde que iba en la preparatoria. Tuve muchos intentos, experimentos e ideas que fallaron y no funcionaron. Finalmente con Tecla culmina esta trayectoria de aprendizaje para mí. Lo más importante es que estoy trabajando en lo que me gusta. La emoción de ofrecer una herramienta que funciona para la gente puede ser pasajera, pero el hecho de estar trabajando en lo que me gusta es lo más satisfactorio y me ayuda a seguir trabajando en eso.
AIC: ¿Cómo es que surge su interés para desarrollar este tipo de tecnologías?
Fotografía cortesía de Prensa IberoJSA: Generalmente yo atribuyo este interés a que mi papá tenía una visión muy apasionada de la justicia social. Recuerdo que siempre me hablaba de la discriminación racial en México, de cuestiones que establecían patrones de exclusión en nuestro contexto. Siempre he tenido mucha curiosidad de hacer algo al respecto, pero mi interés siempre fue en la tecnología. En una ocasión, en una plática sobre tecnología se comentó que esta se podía usar para proveer igualdad para personas con discapacidad. Entonces me empecé a interesar más porque sentí que desde esa visión podía empezar a hacer algo.
AIC: ¿Cuál es su trabajo de investigación actual?
JSA: Sigo trabajando con la mejora del dispositivo. Llevamos ya un año buscando acortar las barreras que existen todavía. El contexto en Android es diferente que iOS, porque Apple está diseñando sus productos de acuerdo con la necesidad de las personas con discapacidades. Pero con Google hemos tenido muchos problemas y barreras técnicas porque no diseña sus dispositivos con prácticas estándares de accesibilidad. Tenemos que hacer mucho trabajo para compensar las limitaciones que existen en este sistema.
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